El marketing es nuestro gran aliado a la hora de hacer que nuestro negocio se desarrolle y alcance sus objetivos. Siempre y cuando no cometas estos errores.
Esperar que el producto se venda solo
Un punto importante del marketing es comunicar bien el producto, este error por lo general se comete por falta de formación. Puedes tener una idea excelente y dominar un tema, per también tienes que saber vender ese producto. Si los clientes no conocen un artículo y no saben para que sirve, existe muy pocas posibilidades que lo acepten sin una campaña de marketing.
No diseñar o mal diseñar el plan de marketing
Diseñar un plan de marketing que no se ajusta al negocio o al mercado que se intenta alcanzar puede ocasionar una falta de planificación que se materializará en la tomade decisiones equivocadas. A la hora de hacer una estrategia de marketing o publicidad, tienes que tener muy claro a quién te diriges, qué quieres conseguir y hasta dónde quieres llegar.
Establecer de forma incorrecta el precio
Por desconocimiento de la relación calidad-precio de la competencia y por complejo de inferioridad cuando se empieza un negocio, muchos terminan poniendo un precio demasiado bajo. Este es uno de los problemas más usuales en los emprendedores. Aunque confías en tu capacidad para hacer bien las cosas, crees que la marca de tus competidores tiene mucho mas detrás que la tuya, pero eso no es cierto, el error más común es que para ser competitivo y atraer clientes pones un precio demasiado barato a tus productos, y creas la sensación contraria, ya que el cliente percibe que si eres barato es porque no vas a ofrecer un buen servicio, por lo que devalúas tu imagen.
No planificar
Imagina esto: tienes un producto rompedor, y pasas de forma rápida de 10 a 500 clientes, que no puedes atender, lo más probable es que lleguen nuevos competidores que aprovechen esa demanda que has creado tú con tu producto. Nuevos competidores que, si además se han dimensionado correctamente, te ganan la batalla. La planificación es casi la única herramienta que tenemos para evitar que una gran superficie lance un producto similar al nuestro y nos deje fuera del mercado.
Un producto inadecuado
A la hora de ingresar a un mercado virgen puede que tu producto no sea el adecuado. La exclusividad de tu producto puede ser el factor de éxito, pero depende del mercado al que te diriges encontrarnos con alguna limitación. Por eso es importante aprender del error y reconocer que nuestro producto o formato no funciona en todas las ciudades.
No gestionar las quejas y no tener un servicio posventa
Escuchar al cliente y dar respuesta es vital para el éxito de un negocio. Por lo general los pequeños empresarios por falta de recurso o planificación han omitido este punto en su plan ocasionando muchas veces caídas de empresas de comercio electrónico. Elabora un plan de posventa que permita dejar a tus clientes con el mayor grado de satisfacción posible.
Enfocarse en un publico equivocado
Un error muy común cuando no se hace, o se hace mal el estudio de mercado.
Centrar las operaciones en un solo cliente
La dependencia de dos grandes clientes, que aportan más del 30% de la facturación, este problema es con el que conviven muchas pymes. Para no multiplicar ese riesgo, te puedes poner un límite de crecimiento del negocio, recurrir al outsourcing, en temas en los que no seas especialista, como por ejemplo, en las estructuras, para permitir seguir dando un buen servicio sin arriesgar tanto.
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